¿Quién no conoce esta popular fiesta alemana?
Sus orígenes se remontan a 1810 con la boda real de Ludovico I y Teresa de Sachsen-Hildurghausen y se celebra de forma anual entre finales de septiembre y principios de octubre en Munich.
Pero ¿sabes que durante las primeras 8 celebraciones del Oktoberfest no fueron con cerveza sino con vino?
En realidad, aunque hoy se conoce como la fiesta de la cerveza es habitual poder degustar también vino.
De hecho, según sus datos oficiales se consumieron casi 95.000 litros en su última edición.
Eso sí, en el mundo hay otras fiestas mucho más centradas en el mundo vinícola, donde la diversión está asegurada y centradas totalmente en nuestra pasión: el vino.
Subtítulo: Fiestas del vino por el mundo
Se celebra anualmente en Brancott, el viñedo más antiguo de la región.
Participan más de 50 bodegas cuyos vinos se maridan con platos nacionales, amenizado todo con música y bandas de jazz.
Es una reunión de restauradores, chefs, barmans, enólogos y gourmets que se reúnen para comer y beber un gran vino. Desde la cocina tradicional americana hasta la cocina experimental. Su programa incluye: clases magistrales, conferencias y actividades recreativas. Además, los beneficios del festival se destinan a organizaciones benéficas.
Desde la Fiesta de la Filoxera en la capital del Cava, en la que se construyen reproducciones gigantes de esta plaga, pasando por La batalla del vino de Haro, que está considerada una fiesta de Interés Turístico Nacional y en el acabarás literalmente “bañado en vino”…
O por la Gran Fiesta de la Vendimia de Ribera del Duero que organiza el Consejo Regulador de la Ribera del Duero con el Ayuntamiento de Aranda de Duero hacia finales de septiembre.