El día 22 de septiembre, el verano dijo adiós y dimos la bienvenida al otoño.
Las temperaturas, además, son una buena muestra de ello, ya que hemos pasado de contar con días de un calor inmenso, a tener lluvias y tormentas sin preaviso y vientos fríos.
Todo esto propicia cambios a todas las escalas, ya que al igual que hacemos cambios de armarios para adaptarnos a esta nueva estación, también empezamos a mudar otras cosas, como son los platos que consumismo.
Si en verano nos apetecen platos más frescos y ligeros, el otoño nos marca el comienzo de una nueva gastronomía basada en recetas más contundentes y calóricas.
Los vinos blancos o rosados continúan siendo muy buenos acompañantes, pero, sin duda, el paladar busca, en estas fechas vinos con más cuerpo y potentes.
Vinos que mariden a la perfección con los productos de esta temporada, así como con platos más elaborados.
El otoño es época de setas, calabaza y frutos secos como las castañas, o la caza. Ingredientes que resultan básicos para preparar estos guisos de temporada.
Además, las legumbres comienzan a tener un gran protagonismo en platos como las lentejas, el cocido, o la fabada.
Sin dejar de lado, los guisos con caza que adquieren una gran importancia.
El clima frío marca el apetito de los comensales, buscando platos que templen el cuerpo y el alma.
Por todo esto, algunas de las recomendaciones para elaborar un maridaje propio de reyes, son:
– Cremas de calabaza o de castañas acompañadas con un Protos Crianza
– Estofado de Corzo con setas que casa con Protos Roble
– Cocidos y platos de cuchara en general cuya base sea la legumbre acompañado de Finca El grajo Viejo
– Sin olvidarnos de otras carnes menos potentes que la caza, como pueden ser:
–Los solomillos a la pimienta o al roquefort, que con una buena copa de Protos Reserva hará la delicia de todo el mundo.
– O el famoso Lechazo, que regado con Protos´ 27 o Protos Gran Reserva, potenciará todos los sabores.