El mejor vino blanco joven de España es nuestro Protos Verdejo. Al menos eso es lo que opinan los lectores y creadores de la Guía Gourmets, después de que el pasado mes de abril nos otorgaran tal distinción en el marco de su 33º edición del Salón Gourmets.
Este galardón tiene un valor especial, dado que estamos hablando de todo un referente dentro del sector del vino. A fin de cuentas, suyo es el mejor manual, en el que es posible encontrar características y precios de los vinos, comentarios, calificaciones, bodegas…
Como en otras ocasiones, el mejor vino blanco de 2019 ha sido elegido mediante el voto de los lectores de la guía durante el año 2018. Eso sí, antes de llevar a cabo esta votación, 23 profesionales –catadores, enólogos, sumilleres y periodistas– realizaron una cata a ciegas de nada más y nada menos que 4.600 vinos, con el objetivo de seleccionar a los finalistas. Y de esta ingente selección, nuestro Protos Verdejo fue elegido por sus excelentes cualidades.
Esta distinción se une además al galardón obtenido en los prestigiosos Premios Sarmiento al mejor verdejo joven de la Denominación de Origen Rueda, lo que da una muestra de la calidad de este vino.
Si hablamos de las principales características de Protos Verdejo, cabe señalar las siguientes:
En la misma cata, Protos Verdejo Fermentado en barrica también fue elegido como verdejo con crianza en barrica.
Una de las características más singulares de este vino blanco joven es su proceso de crianza. Este consiste en dejar que el vino envejezca durante tres meses sobre lías, o lo que es lo mismo, sobre los posos de las levaduras muertas que se han ido depositando en el fondo del deposito. En esta fase, se rompe la pared celular de las lías y las sustancias pasan al vino aportándole intensidad, estabilidad y disminuyendo el riesgo de oxidación.
Y como nadie puede juzgar un vino sin probarlo, así debe hacerse con el blanco verdejo ganador. Para ello, es necesario servirlo con una temperatura de entre 8 y 10ºC, si queremos percibirlo a través de todos los sentidos durante la cata.
Con solo ver su color amarillo pajizo, sabremos que se trata de un vino blanco joven. Al acercarlo notaremos sus aromas frescos, intensos, tropicales y cítricos con toques herbáceos de hinojo y anís. En boca tenemos ante nosotros a un vino seco, pero conservando una acidez natural moderada que le aporta frescura y viveza, redondo y con cuerpo, bien estructurado.
Al final no puede faltar un toque ligeramente amargo, característico de la variedad verdejo y que hace que sea un vino con una larga persistencia para nuestro recuerdo.
Cuando tenemos ante nosotros al mejor vino blanco joven de 2019, no hay nada mejor que catarlo acompañado de un buen maridaje. Algunas de las opciones son: arroz con merluza y almejas, cóctel de marisco, doradas al horno, quesos frescos y suaves, sopa de pescado o diferentes cremas de guisantes, calabacín, puerros… ¡toda una infinidad de opciones entre pescados, pastas, arroces, verduras y quesos para disfrutar de un vino sobresaliente!
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