Hoy en día la reputación de cualquier marca depende en buena parte de la opinión de personas influyentes. Si ellos dicen que algo está bien, el cliente de primeras lo percibirá así, al menos hasta que lo pruebe. Y en el sector del vino no iba a ser menos. A la hora de comprar un buen vino siempre nos guiamos por nuestros gustos, conocimiento, recomendación e incluso por algún sistema de puntuación como pueden ser los Puntos Parker.
Estos son obra de Robert Parker, un abogado estadounidense que un día, ni corto ni perezoso, comenzó a hacer crítica de vinos. Y fue adquiriendo tal relevancia que terminó creando uno de los sistemas más extendidos internacionalmente, capaz de influir en la reputación de las mejores bodegas del mundo. Pero y, ¿qué son los Puntos Parker y en qué consiste este sistema?
Los Puntos Parker surgieron cuando Robert Parker viajó en su época de estudiante a Europa y se dio cuenta de que el vino era más barato de lo que imaginaba. Cuando regresó a Estados Unidos fue consciente de la falta de conocimiento en la cultura del vino y la elección de los consumidores. De esta manera, en la década de los 70 Robert Parker fundó el boletín The Baltimore-Washington Wine Advocate, que en 1979 se convertiría en el actual The Wine Advocate en el que bimensualmente calificaba y daba puntuación de vinos en las catas realizadas.
Su objetivo era tan solo que el consumidor contara con una guía, aunque pronto su crítica de vinos fue ganando adeptos que se convirtieron en un número cada vez mayor de suscriptores. Pronto se convirtió en el crítico más querido y más temido a la vez en el mundo vitivinícola, ya que los Puntos Parker definían la calidad de los vinos de una manera cada vez más influyente. Esto supuso roturas de stock por subidas de ventas o situaciones problemáticas por una mala crítica en diferentes bodegas.
Dentro de esta puntuación de vinos, Parker posee diferentes catadores expertos en todo el mundo. En sus catas se tiene en cuenta la calidad del vino y si refleja la esencia de la región o denominación de la que procede. Algunos ejemplos los hallamos en nuestro Protos Gran Reserva 2004, que obtuvo 90+, así como en Protos Seleccion de 2009 (90 Puntos Parker).
Aunque hay varios sistemas de puntuación de vinos, la Lista Parker ofrece la siguiente escala:
Asimismo, para la elaboración de la Lista Parker hay que tener en cuenta que la puntuación de vinos parte de un total de 50 puntos que se obtienen de la siguiente manera:
Aunque ya sabemos que las catas tienen un carácter subjetivo y que no hay nada más fiel que el paladar propio, las bodegas centraron sus esfuerzos en conseguir la máxima puntuación para la Lista Parker. Tanto es así que algunas elaboraron los vinos pensando ya en sus gustos.
Eso sí, si el consumidor busca un vino con buena calidad-precio, los que estén entre los 80-89 de puntuación no suelen defraudar. Hoy día tiene un equipo de catadores profesionales que son los encargados de evaluar y publicar la puntuación de los vinos catados.
Durante el mes de mayo Robert Parker hizo pública la noticia de retirarse definitivamente de la revista The Wine Advocate. Ya en 2011 cedió sus deberes como catador de los vinos franceses de Borgoña y estadounidense de California a Antonio Galloni, que pasaron más tarde a Neal Martin y Jeb Dunnuck en 2013. Además, en 2015 y 2016 cedió sucesivamente las catas de Burdeos e informes a Martin.
Es más, en los últimos tiempos Robert Parker únicamente aportaba su imagen y la firma de catas y puntuaciones de vinos no oficiales en la sección “The Hedonist’s Gazette”. Por lo tanto, tarde o temprano todos esperaban la noticia. Y así sucedió. Eso sí, los Puntos Parker seguirán estando en boca de todos.