Aunque la época de vendimia es el hito más conocido de una bodega… lo cierto es, que, durante todo el año, hay una serie de cuidados muy importantes que se realizan en el viñedo hasta llegar a la famosa recogida de la uva…

Por eso, en este post, vamos a hablar de uno de ellos: la poda en verde.

La poda en verde, en términos generales, consiste en eliminar aquellos brotes o tallos que sabemos que no tendrán uvas.

Esta poda es conocida como la poda en verdea y es complementaria a la poda de invierno y es, sin duda, uno de los trabajos más significativos que se realizan en el viñedo.

poda en verde

¿Por qué?

Porque gracias a él, podremos conseguir uvas de una gran calidad, limitar su producción y controlar el riesgo de plagas.

Poda en verde en Protos

Fernando Ruiz, del departamento técnico de Protos, cuenta  cómo se lleva a cabo en los viñedos de la bodega:

Objetivo

Hay que seguir con la labor que empezamos con la poda de invierno debiendo conseguir un equilibrio de la producción de madera, producción vegetal y calidad de los racimos.

Cuanto mejor hagamos la poda en verde conseguiremos que, posteriormente, mejor situados estén los pámpanos, a una distancia equidistante y mejor repartidos están las partes verdes (vegetación) en la cepa.

Lo que implica mayor insolación, mejor ventilación y por tanto mayor resistencia a enfermedades criptogámicas y a condiciones climatológicas adversas.

Al final, lo que perseguimos, como con el resto de operaciones en verde, es conseguir llegar a producir racimos de mayor calidad para que nuestros enólogos puedan elaborar, como vienen haciendo desde hace años, el mejor vino de guarda posible

Y esto lo conseguimos aquí, en la Ribera del Duero, posiblemente, una de las mejores regiones vitivinícolas de España, sin lugar a dudas.

¿Cuándo y cómo se hace?

Se hace en esta época. Cuando los tallos tienen una longitud entre 10 y 20 centímetros.

De forma manual, eliminando el brote elegido por la base de éste con los dedos.

Se necesita mucha mano de obra cualificada, siendo una labor muy delicada en la que habrá que tener sumo cuidado…

De forma que, cuando eliminemos un brote procedente de una yema franca únicamente eliminemos éste y respetemos su gemelo.

Debemos elegir el que mejor posicionado esté y nos aporte racimos. Daros cuenta que la persona debe recorrer lineo por lineo y pararse en cada una de las cepas a hacer esta labor.

Paso a paso

Una vez brotadas las yemas de nuestros viñedos, nos encontramos en el momento en el que realizamos la primera de las operaciones en verde: esto es, la Poda en Verde.

Esta consiste en la supresión de una serie de brotes o tallos.

Eliminaremos en principio aquellos brotes que procedan de madera de más de un año, esto es, brazos y tronco, y que generalmente no nos aportan uva.

Es posible que nos interese respetar algún brote para utilizarle el próximo año como nuevo pulgar para renovar poda.

También, suprimiremos uno de cada dos brotes gemelos procedentes de las yemas francas dejadas en el pulgar en la poda de invierno (que vienen provistos generalmente de dos racimos), así como los brotes procedentes de yemas ubicadas en la inserción del pulgar con el brazo, es decir: yemas ciegas y casqueras.

Puede que en algún caso nos interese respetar y no podar algún brote procedente de yemas casqueras para rebajar la poda de invierno del próximo año.

poda en verde

Conclusión

Con la Poda en Verde conseguimos distribuir de manera óptima la vegetación de la cepa, mejorar las condiciones sanitarias y comenzar a regular la carga y distribución de los futuros racimos.

El coste de mano de obra es muy alto ya que se necesita hacer la poda en un breve espacio de tiempo, por lo que se necita mucho personal.

Pero su realización es necesaria en una viticultura de calidad en la Ribera del Duero aportando calidad y carácter a los vinos de guarda que elaboramos.