¿Qué Protos habría sido el favorito de las monarquías españolas?

¿Qué Protos habría sido el favorito de las monarquías españolas?

A lo largo de la historia de la Monarquía española, el vino ha sido un elemento recurrente en las celebraciones y banquetes reales.

Sin embargo, la realidad es que, a lo largo de diversos siglos, los vinos producidos en España no siempre fueron los más apreciados por sus monarcas, ya sea por influencias de las casas reales, gustos personales o la reputación de otras regiones vinícolas.

Hoy hacemos un viaje enológico a través de la historia, en el que imaginaremos, según el tipo de vino que bebían, qué Protos habrían elegido los Reyes, si es que Protos hubiera nacido antes.

La Edad Media y las primeras monarquías: Vinos con carácter

Durante la Edad Media, los vinos consumidos en las cortes reales eran el reflejo de la diversidad de los territorios. Los reinos de Castilla, León, Aragón y Navarra contaban con sus propias tradiciones vinícolas. Aunque no disponemos de los nombres de las bodegas exactas, podemos imaginar que vinos con carácter, elaborados con las variedades autóctonas de la época, eran los protagonistas de los banquetes reales.

A pesar de que, como ya comentamos en otra entrada,  los vinos blancos de Medina del Campo eran los favoritos de Isabel la Católica, creemos que los vinos tintos robustos y con cuerpo, elaborados principalmente con uva Tempranillo, podrían considerarse herederos de ese carácter que seguramente apreciaban los monarcas medievales. Por eso, creemos que un Protos Crianza, con su equilibrio y estructura, habría sido el elegido de aquella época.

Protos Crianza

El Siglo de Oro y los Austrias: Vino y literatura

El Siglo de Oro español fue una época de esplendor en las artes y las letras, y el vino no fue ajeno a este florecimiento. La literatura de la época nos ofrece pinceladas de la importancia del vino en la vida cotidiana y en los festejos. En «El Quijote» de Miguel de Cervantes, aunque no se detalla la procedencia de los vinos, las referencias a banquetes y celebraciones con vino son frecuentes.

La influencia de los Austrias marcaba la procedencia del vino. Se decía que Felipe II prefería los vinos alemanes, especialmente aquellos elaborados en Rheingau y la Mosela, conocidos por su dulzor y calidad.

A pesar de esta inclinación, podemos imaginar que en una mesa real del Siglo de Oro, un vino dulce y elegante como un Aire de Protos seguramente habría complacido al paladar de Felipe II, ofreciéndole una muestra del esplendor vinícola español.

La Ilustración y los Borbones: Influencias y nuevos gustos

Con la llegada de los Borbones a la monarquía española en el siglo XVIII, la influencia francesa se hizo notar en muchos aspectos de la vida, incluyendo la gastronomía y el consumo de vino. Se introdujeron nuevas variedades y técnicas, y los vinos elegantes comenzaron a ganar popularidad en la corte.

En este panorama, la monarquía española seguramente habría apreciado vinos tintos con cuerpo, sabrosura y elegancia. Un vino moderno como Protos Finca El Grajo Viejo, con aromas a roble francés, les habrían evocado a los vinos de su corte.

Protos selección. Finca El Grajo Viejo

 

La Restauración: El vino como símbolo de identidad nacional

Durante el siglo XIX, y particularmente la época de la Restauración, se vivió un contexto de búsqueda de estabilidad y reconstrucción nacional bajo la restaurada monarquía. Fue un periodo en el vino se erigió como un símbolo de tradición y unidad. Aunque no se dispone de información específica sobre qué vinos exactos se servían en la mesa real, cuentan que los vinos españoles empezaban a entrar en Palacio.

En este contexto donde la calidad y la diversidad eran apreciadas, la Ribera del Duero comenzaba a destacar por sus vinos tintos. Por este motivo, creemos que el Protos Gran Reserva hubiera sido el elegido. Es un vino que representa esa búsqueda de la excelencia, algo que perseguían los Reyes para volver a lo que un día fueron.

Botella de vino Protos Gran Reserva

 

En definitiva, al repasar la historia de la Monarquía española, el vino emerge como un elemento constante de celebración y distinción. A pesar de que el vino español no fuera tan considerado en aquellos años, sabemos que si Bodegas Protos hubiera existido desde la Edad Media, su tradición y su calidad habrían encontrado su lugar en las mesas de los reyes.

¿Te animas a dejarte llevar por la imaginación?

¡Decide qué vino crees que habría sido el predilecto de cada monarca a lo largo de la historia de España!

Entradas anteriores