Historia

Protos

TODA LEYENDA TIENE UN ORIGEN
Antigua Bodega Protos Historia

Nuestros comienzos

Era el año 1927, cuando 11 amigos de infancia – todos adultos ya y en diferentes profesiones – se reunen para celebrar sus raíces como viticultores y el amor por su pueblo, Peñafiel. Ellos tenían un sueño, no sólo elaborar grandes vinos sino resaltar la importancia de esta olvidada tierra con ilustre herencia. Juntos ayudarían a cambiar la historia de esta región, de vinos rústicos para consumo propio a una de las denominaciones de origen más reconocidas de España, Ribera del Duero.

Aquellos visionarios honraban el terruño, entendiendo sus necesidades y visionando el futuro que vendría, así Protos se volvió una de las bodegas más conocidas e importantes de Ribera del Duero.

Protos

¿Por qué Protos? Porque estos pioneros entendieron el potencial de esta región y la importancia de una marca. Buscaron un nombre que fuese universal y que a su vez expresara fácilmente su visión. Lo encontraron en la palabra griega πρῶτος, Protos, que significa “Primero.”

Ribera Duero

Seguros que esta región estaba destinada al éxito, Protos registró la marca Ribera Duero, 55 años antes de que se creara la denominación de origen.

De Peñafiel

En honor al pueblo donde todo empezó y su terroir, que no sólo es el suelo, clima y variedad, sino también el trabajo de las personas.
Etiqueta Bodegas Protos Antigua 1927
Fundadores Bodegas Protos

Nuestra Comunidad

Esas 11 familias creían fervientemente en este proyecto y aún lo hacen, con cuatro nietos de esos primeros fundadores en la actual Junta Directiva. Con el paso del tiempo, muchas otras familias se sumaron a este gran proyecto, haciendo de Protos un emblema de identidad en esta región…

“He estado vendimiando desde que aprendí a caminar, tanto mi padre cómo mi abuelo han sido parte de Protos desde hace más de 80 años”

Más de 250 familias

Hoy en día, más de 250 familias forman parte de ésta comunidad, unidos por el mismo objetivo: hacer vinos excepcionales en una región singular. Terceras y cuartas generaciones mantienen viva la pasión de sus ancestros, trabajando diariamente con esfuerzo y compromiso. Ahora, se benefician del conocimiento trasmitido por su antepasados, unido al estudio en profundidad de cada parcela de viñedo por parte de Protos. Esta comunidad incluye 300 viticultores y 8 ingenieros agrícolas que cuidan nuestras parcelas durante todo el año, además de un equipo de 8 enológos dirigidos por Marilena Bonilla, una de las pocas directoras técnicas en la Ribera del Duero. Todos dedicados a la constante mejora de nuestros vinos para que lleguen en su máxima expresión a todos los amantes del vino en el mundo.
Bodegas Protos Historia

En Protos, seguimos aprendiendo

Con este espíritu pionero, Protos continua evolucionando, adaptando nuestros vinos con el máximo respeto a la tierra, manteniéndonos en la vanguardia de los vinos de calidad en España.

En los últimos 10 años, Protos ha estado estudiando todas y cada una de las parcelas de viñedos que tenemos, observando cómo los clones de tempranillo se adaptan y cambian según su situación geográfica, ayudándoles a desarrollar su potencial. Estos estudios nos llevaron a dividir y subdividir todos los viñedos para así tener un conocimiento más profundo de la viña y elaborarlo por separado para lograr la máxima expresión de cada terruño.

En Protos, mantenemos un estricto control sobre todos nuestros viñedos durante el año, monitoreando sus niveles de madurez y analizando 200 muestras diarias para conocer el momento idóneo de recolección en cada uno de los viñedos.

La alquimia del vino

Hoy en día, en Protos nos esforzamos en utilizar procesos naturales y respetuosos durante toda la elaboración para lograr una expresión del terruño en cada uno de nuestros vinos. Nuestros rosados y blancos, provienen de diferentes areas y microclimas, donde la autenticidad de la variedad de uva es quien guía las expertas manos de nuestros viticultores. Nuestros tintos, elaborados por nuestros incansables enólogos, encarnan por un lado el caracter puro y fresco de la Tempranillo y –gracias a las técnicas perfectas de crianza y ensamblaje- por el otro la más alta expresión y complejidad del “Tinto Fino”. Un riguroso nivel de selección y recogida de nuestros mejores pagos – aún trabajados por las mismas familias que los cultivaron – son nuestro sello de autenticidad en nuestros vinos.